Una terapia que se diferencia de la psicoterapia clásica, llegando de forma rápida a la solución de conflictos psicoemocionales y conductuales, abordando de forma más directa y profunda el motivo del malestar que se sufre o interfiere en la normalidad y cotidianidad de nuestro día a día y nuestras relaciones y comportamientos, cambiando la visión sobre nosotros mismos y las eventualidades que se dan en la vida y como las experimentamos y solucionamos.